Por Gabriel Rodríguez | 28 Sep 2020 – 12:11 pm.
La organización no gubernamental (ONG) Prisoners Defenders aseguró que el régimen cubano se encuentra en quiebra técnica y no tiene liquidez para pagar actividades corrientes, razón por la que comenzará a echar mano del dinero de colaboradores.
“Régimen HOY se encuentra en quiebra técnica y sin tesorería: varias fuentes, una del MINCEX (Ministerio de Comercio Exterior), nos confirman que la Seguridad del Estado ha dado orden de extraer 50% de cuentas bancarias de colaboradores: no tienen cómo pagar actividades corrientes. Es el principio del fin”, escribió la ONG en Twitter este lunes 28 de septiembre.
En declaraciones a ADN Cuba, el presidente de Prisoners Defenders (PD), Javier Larrondo, aclaró que las cuentas bancarias afectadas serían las de los colaboradores cubanos que están trabajando en el exterior. “No creo que sean sólo las de los médicos, creo que afecta a más gente”.
“Así me ha llegado (la información). Me han llegado además varios textos y de varias fuentes. Varios de los textos coinciden… Ya cuando les roban a los colaboradores… Eso es que están en las últimas, en una situación crítica, están sin cash”, explicó Larrondo.
PD, además de mantener un listado actualizado de los presos políticos en Cuba, es una de las organizaciones que más ha denunciado internacionalmente el negocio del régimen con las misiones médicas. Bajo el manto de una pretendida solidaridad, La Habana explota a los galenos al quedarse en muchos casos con el 90 por ciento de sus salarios en los países donde sirven, y los somete a prácticas y condiciones similares a las de la trata de personas.
La eventual extracción del régimen de parte del poco dinero que deja a sus colaboradores en los bancos de la isla da cuenta de una situación que muchos veían venir y era un secreto a voces: entre la pandemia de coronavirus, las sanciones y la incapacidad de siempre de una economía amarrada por el Estado, Cuba está inmersa en una profunda crisis de la que no saldrá con remiendos, como en ocasiones anteriores.
La escasez y el desabastecimiento generalizados que padecen los cubanos desde hace meses son sólo los primeros síntomas de esa situación crítica, que hace temer a los fantasmas del pasado y a una agudización extrema de los males y la precariedad, como en esos sufridos años iniciales de los 90 del pasado siglo, llamado eufemísticamente por el oficialismo como “Período Especial”.
Un período que los cubanos no han dado nunca por terminado, pero cuya realidad en aquellos años recuerda siempre que todo puede ir a peor, máxime cuando justo ahora no se percibe un nuevo salvador foráneo, al estilo de la Venezuela de Hugo Chávez.
La revelación de Prisoners Defenders (PD) ocurre el mismo día en que el Departamento de Estado estadounidense anunció nuevas sanciones contra el régimen de la isla.
En esta ocasión, el gobierno de la nación norteña agregó a su lista de empresas cubanas sancionadas y prohibidas a American International Services (AIS), la cual provee el servicio de recargas a las tarjetas en moneda libremente convertible mediante las que los cubanos pueden comprar en las tiendas en divisas habilitadas por el régimen.
En la nota mediante la que anunció la sanción, el Departamento de Estado recordó que AIS, aunque tenga su sede en Panamá, es una empresa controlada por militares cubanos al igual que su par en Cuba, Fincimex, la cual fue agregada a la lista unos meses atrás.
Ambas se utilizan para financiar el aparato represivo del castrismo, agregó la nota, razón que justifica la sanción a ojos de Washington.
“Agregar AIS a la lista de empresas sancionadas promueve el objetivo de la Administración de evitar que el ejército cubano controle y se beneficie del flujo de remesas que, en cambio, debería beneficiar al pueblo cubano”, subrayó la nota.
Estas publicaciones no representan necesariamente las opiniones del Instituto de Estudios Cubanos.